Desde aquí, quiero agradecer a todos los vecinos que apreciaban y querían a nuestro Presidente, “Ernesto”, que han dejado la comodidad del hogar para dar el último adiós a esta magnífica persona. Es de agradecer esta multitudinaria presencia mostrando nuestros respecto a Ernesto, así como, esa muestra de cariño a una persona que se desvivía desinteresadamente por sus convecinos, que además, estaba allí donde un vecino le necesitaba o le exponía un problema para solucionarlo.
Por todo ello, querido amigo “Ernesto”, descasa en paz y desde donde estés vela por todos nosotros. Te recordaremos siempre.
Adiós “AMIGO”