Querido convecinos, ayer fue un día grande. El Ayuntamiento nos deja construir.
Hoy es el día después de la firma del Convenio de Gestión. Hay un antes y un después del día de ayer. Hoy podemos decir, con la cabeza alta, que somos Cañaveral.
A partir de aquí se verá quien ha hecho el trabajo como ha dicho. Quien consigue financiación, y quién va a tener que rezar más que uno del OPUS.
Hoy es un día de reconocimiento de todos los que hemos aguantado aquí y hemos creido en ésto. Y a todos los Consejos Rectores,sin excepción, que han luchado por conseguir la Simultaneidad.
Hoy es día de comida copiosa, café, champán y puro. De celebración, y reconciliación. De empezar a hacer barrio.
Un hombre de bien.