Los Otros dijo:
Me encanta lo de:
"los niños campan a sus anchas, mientras comemos tranquilamente"
Efectivamente, los papás comen de lo más tranquilamente. Ahora, el resto de comensales, ya es otra cosa...
Totalmente de acuerdo. Creo que no se puede ir a cenar, comer, incluso tomar el aperitivo y soltar a los niños cual animalillos. Angelitos, ellos no tienen la culpa, pero es que algunos padres... dejan bastante que desear. Precisamente hace un mes en la taberna viví una escena tremenda.. Vale que lleven los cochecitos, pero es que estaban tirados en medio del bar así como los barrilitos, también ocupados con un montón de trastos. Cuando llegamos, ni siquieran inmutaron.. el niño con un triciclo por medio de la taberna.. atropellando a la clientela.. una auténtica jauría!Por favor, no pretendamos llevar exactamente la misma vida de antes de tenerlos y seamos conscientes de que son sus hijos...no los de todos.