La socimi Merlin Properties ha acordado con la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de la capital la construcción y financiación de un tramo de carril bus que permitirá atajar parte de los problemas de movilidad que sufre el barrio y área empresarial de Las Tablas, donde están radicadas algunas de las principales multinacionales del país, como Telefónica, BBVA o FCC.
La compañía, propietaria de 18 parques empresariales en el entorno de la autovía A-1 con más de 300.000 metros cuadrados de superficie, da cobijo en sus inmuebles a más de 25.000 trabajadores de grandes y medianas empresas que diariamente se trasladan hasta este PAU y su vecino Sanchinarro en transporte privado, ya que las opciones para acceder a sus oficinas en transporte público son bastante escasas.
Esta situación ha derivado en una congestión casi permanente de los accesos a ambos barrios y de la autovía A-1, de forma que en horas punta, la carretera se encuentra casi al límite de su capacidad. Esto, además, genera retenciones y atascos que afectan a las líneas de transporte público, ya que en el corredor no existen carriles reservados para estos vehículos. Por esta razón, Merlin Properties encargó en 2019 un estudio de viabilidad que buscase una solución al problema existente.
Carril bus por una vía alternativa
El estudio previo realizado por la compañía han acordado la implantación de un carril bus en sentido salida de Madrid por la avenida de Burgos, en un tramo de algo menos de un kilómetro entre la avenida de San Luis y la carretera de Fuencarral a Hortaleza. Este podrá ser utilizado por autobuses de transporte público y privado, como las lanzaderas que a día de hoy ya tienen implantadas muchas de las empresas de la zona.
El plan de Merlin, compartido por las instituciones madrileñas, pasa por "aumentar la velocidad comercial del transporte colectivo, haciéndolo más competitivo frente al vehículo privado y evitando la penalización en los tiempos de viaje debido a la congestión existente". Una vez urbanizado el ámbito de Madrid Nuevo Norte, el carril bus se reconvertirá en carril bici.
Un convenio a tres
Los gobiernos de Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez Almeida han asumido que el modelo de movilidad en la zona norte de Madrid es ya "insostenible" debido a "la concentración horaria de los desplazamientos o la baja competitividad del transporte público". A este respecto, la competencia en la gestión de la vía hasta el límite del término municipal pertenece al Ayuntamiento de Madrid, mientras que la gestión del transporte público la realiza la Comunidad a través del Consorcio Regional de Transportes.
Las tres partes han refrendado un convenio que permitirá poner en marcha esta pequeña pero vital infraestructura a cargo de las cuentas de Merlin, que financiará la obra y se encargará de redactar el proyecto constructivo que tan solo requerirá el visto bueno del Ayuntamiento de Madrid. De esta forma, la socimi se convierte de facto en promotora de infraestructuras de transporte, aunque sea con este pequeño proyecto piloto marcado por las circunstancias. Una vez el consistorio apruebe el proyecto, tendrá seis meses para arrancar las obras y un año para completarlas.
Las Tablas, el barrio de las multinacionales
Tanto Las Tablas como Sanchinarro se han convertido en las zonas de moda para la instalación de grandes empresas y multinacionales. El corredor de la A-1, situado al norte de la capital y que supondrá el límite natural de la operación Madrid Nuevo Norte, acoge hoy un gran número de parques empresariales que han atraído a firmas como Dragados, Peugeot, Renault, Porsche, Técnicas Reunidas, Caser, AstraZéneca, Abbott, TP Link o Clece. Esta autovía canaliza, por tanto, los desplazamientos de los empleados de todas estas compañías, además del acceso de los vecinos de Alcobendas, San Sebastián de los Reyes o los municipios del norte de la provincia de Madrid.
En los últimos años, el Ayuntamiento de Madrid ha tratado de mejorar la velocidad comercial de los autobuses que dan servicio a estos barrios mediante el pintado de carriles bus en Las Tablas y Sanchinarro, así como otros barrios de la ciudad. En 2020 se señalizaron 1.150 metros de carriles reservados, que se sumaban a los implantados en años anteriores. También se puso en marcha una nueva línea de autobús a la zona norte de Las Tablas. Sin embargo, los problemas de circulación no están en el interior de los barrios, sino en sus accesos, escasos y mal diseñados para el tráfico que finalmente están asumiendo. Desde la recepción del PAU (programa de actuación urbanística), no se ha modificado ningún vial.