AENA «compra» el silencio de los ayuntamientos afectados por el ruido del aeropuerto de Barajas http://www.larazon.es/noticias/noti_mad5599.htm Un informe interno propone dar «monedas de cambio» para «aumentar la comprensión de los afectados» Jaime G. Treceño
http://www.larazon.es/Imagenes/046mad25fot2.jpg El impacto acústico de Barajas ha llegado a provocar el traslado de barrios y la insonorización de miles de viviendas afectadas por el ruido
Madrid- La empresa pública que gestiona los aeropuertos españoles (AENA) quiere mantener en silencio a los alcaldes de los pueblos afectados por el ruido del aeropuerto de Barajas. Y para eso no ha dudado en ofrecer compensaciones económicas, es decir, «monedas de cambio», para «comprar» ese silencio. Así se extrae de un informe interno al que ha tenido acceso este periódico y en el que se analizan las posibles soluciones al problema del ruido en Barajas.
El citado informe señala, en su punto quinto: «Además de las soluciones técnicas, operativas y/o constructivas existen otras soluciones que, sin disminuir el impacto acústico, sí pueden aumentar la comprensión de los afectados. Estas soluciones, que se pueden denominar “monedas de cambio” van desde realizar actuaciones en el municipio, desde mejoras medioambientales o culturales o deportivas, a crear tasas ambientales que se reinviertan en los afectados o fundaciones que destinen el importe de las multas a actuaciones en las áreas sobrevoladas o el aislamiento de las viviendas».
«Asumo completamente la autoría de ese documento», asegura el director adjunto de Bajaras, José Sanz. «Es un documento de trabajo interno que remitimos a nuestros jefes en el que aportábamos posibles soluciones al problema del ruido que iba generar la apertura de la T-4».
«Es la única solución»
Hay que recordar que, a finales de julio del pasado año, el Gobierno puso en marcha las nuevas trayectorias en el aeropuerto madrileño pese a que la nueva terminal aún no operaba, ya que lo hizo en febrero de este año. Esto provocó una sobrecarga del tráfico y las consiguientes molestias a habitantes de los municipios sobrevolados. En aquel momento hubo denuncias por un posible incumplimiento de la normativa vigente, ya que los trayectos han de ser comunicados a las localidades y, al parecer, no se hizo. La situación fue tal que el tráfico aéreo se incrementó hasta en un 700 por ciento.
«Una vez que no vamos a poder solucionar su problema de ruido, lo que pretendemos es mejorar la visión que tienen de nosotros compensando las molestias que les ocasionamos», precisa Sanz, mientras aclara que aún «no se está aplicando» el contenido del informe. Estamos en la fase en la que los ayuntamientos creen que pueden cambiar las rutas, pero cuando no haya más cambios, comenzará». Aún así, reconocen que ya han hecho alguna actuación en este sentido en municipios como
Belvis, Barajas y Paracuellos. Definición «coloquial»
Respecto a la expresión «moneda de cambio», asegura que se trataba de una definición «coloquial» de las compensaciones, ya que el documento era interno y estaba previsto que no viese la luz». Sanz defiende este método y asegura que este tipo de prácticas son «habituales en los aeropuertos europeos». Además, dice que este tipo de iniciativas sólo se pondrán en marcha en Madrid, ya que los desarrollos urbanísticos en torno a Barajas son numerosos.
Por lo que respecta al documento, después del desarrollo de las soluciones técnicas para atajar el ruido, se analiza la situación específica de los municipios afectados que son: Alcobendas (La Moraleja), San Sebastián de los Reyes (Fuente el Fresno y La Granjilla, los nuevos desarrollos), Tres Cantos, Colmenar Viejo, Algete (casco urbano, Prado norte y Sector 4), Santo Domingo, El Molar, Pedrezuela, Valdetorres del Jarama, San Agustín de Guadalix, Cobeña,
Paracuellos (Belvis, casco urbano, Los Berrocales) , Torrejón de Ardoz, Rivas Vaciamadrid, San Fernando, Coslada y Madrid.
Hay varios casos en el informe en el que se deja claro que la moneda de cambio para los ayuntamientos será la «compensación económica por los incumplimientos». Se hace un repaso de cada uno de los municipios especificando la afección que van a tener. En la conclusión se precisa cómo será la respuesta de los vecinos y, finalmente, se establecen las soluciones, compensaciones... Así,
Fuente el Fresco, la urbanización de Santo Domingo, Belvis del Jarama y el barrio de la Embajada, en Madrid, son calificadas como zonas «de alta sensibilidad, punto de conflicto grave» . Otros adquieren el rango de «posible problema» y en el resto «no se prevén problemas» .
De entre los análisis de los consistorios, llama la atención el que se hace de San Fernando de Henares, del que se dice que «el Ayuntamiento mantiene algunos frentes abiertos que podrían crear problemas “políticos”. Mientras no se termine de trasladar a los habitantes de “Las Castellanas” deben colaborar con AENA en apaciguar el conflicto, ya que estas viviendas se verán muy afectadas» por el ruido de los aviones. Como solución, aportan la «negociación política», con el Ayuntamiento.