A nosotros nunca nos ha llegado agua con una presión decente. Además, al poco de entregarnos la casa hubo un problema en la línea y desde entonces empeoró y se quedó así. El agua caliente es poco más de un hilo. Intentamos cambiar el teléfono de la ducha a uno un poco más ancho y sólo caía agua por un lado.
Además, la pérdida de presión de nuestra caldera es excesiva, según el técnico que la reparó (A los dos años y tres meses se rompió una pieza que antes era de plástico y el repuesto es de metal, están hechas para aguantar lo justo de la garantía). El técnico me dijo que "Me buscara cualquier empresa y pusiera cualquier otra caldera, que cualquiera iba a ser mejor". No hay que decir lo que supone estarse duchando y que alguien abra un segundo grifo.
Pero bueno, son gajes de la vida. Me anima un poco ver que la presión está aumentando en algunos puntos. A la mejor algún día nos llega a nosotros. Eso sí, sabiendo que el eumento de presión puede hacer aflorar otros problemas (Sobre todo en conexiones y tuberías deficientes), conviene estar atentos.
Pese a todo, el desagüe de la caldera ha funcionado alguna vez (además de que goteaban insistentemente las coneciones, estuvimos casi dos años con cacitos debajo de la caldera). Según el manual es obligatorio conectarlo a un desagüe, lo que nosotros hicimos cuando montamos la cocina (menos mal que lo habíamos leído), tubo que tenía que haber dejado Hercesa...
Cuando acabemos de poner al día nuestras casas, empezaremos las renovaciones por antigüedad. Miremos el lado bueno, ¡El bricolaje es divertido! :-)