En primer lugar, el perro que tiene un dueño responsable, y creo que son la mayoria, no deposita sus cacas delante de la casa de su vecino, y si no lo es, desde luego, que donde no las depositará nunca es delante de la suya propia, y es a nosotros, que no tenemos perro y que somos personas cívicas, a los que nos las van a dejar en nuestras puerta y por centenares, desde luego que ese es un razonamiento de justicia retorcida.
En segundo lugar, los pipicanes tienen su justificación lógica, y para solo hay que mirar donde los ha instalado, por ejemplo el Ayuntamiento de Madrid, en zonas muy centricas, con poca zona verde, y donde realmente no hay otros sitios donde los animales puedan hacer sus necesidades o pueda escarparseles cuando dan un paseo con los dueños, e incluso en estos casos, el concejal del distrito ha optado por colocarlos en zonas meditadas dentro de los parques ( Debe ser que estos concejales tienen mas sentido comun) y no ir a colocarlos alegremente delante del portal de algún bloque de viviendas o de la puerta de algún local comercial. Tampoco creo que a ningún concejal serio de estos distritos se le pasara por la cabeza colocar estas "jaulas" en ningún sitio bien visible y venderle a vecinos, también serios, que esa es su infraestructura estrella. Y menos aún iniciar la ejecución de las obras sin consultar a nadie, practicamente de un dia para otro, y aún sin haber realizado una campaña de información sobre el uso de estas instalaciones, por no hablar de campañas de sensibilización del problema, etc, y no haber optado por otras decisiones menos traumáticas, y en fin, sin haberse planteado siquiera que las administraciones públicas democráticas deben orientar su actuación para satisfacer el interés general,respetando el principio de causar el menor perjuicio posible.Y aquí es muy discutible saber cual es el bien general que se pretende proteger con la construcción de estos artilugios incomprensibles.
Con respecto al tipo de estudio que habrán hecho para determinar las ubicaciones, no creo que sea ese, pero si alguno parecido y de la misma profundidad intelectual. Que desperdicio el sueldo que se paga a algunos concejales, es un despilfarro absoluto, porque para tomar esas decisiones sublimes nos saldría mas barato y resultaria igual de eficaz tirar de una ETT, y a sorteo, sacar a cualquiera que estuviera allí inscrito y adjudicarle el nombramiento. En tiempos de crisis todas las opciones de ahorro se deben tener en cuenta.
En cuestiones medioembientales un principio fundamental y que ha costado tanto lograr que se lleve y aplique en las legislaciones es el de que el que contamina, paga, pero aquí, dentro de esta barbaridad, se aplica el de que pague el vecino que le colocan la jaula en su puerta, no el ayuntamiento que coloca estos engendros contaminantes ni el dueño irresponsable del perro.