Ese es el problema, tiene precios de gran heladería con helados mediocres tirando a malos. Si fuera bastante más barata algún día bajaría a tomarme un helado aún sabiendo que no me voy a tomar un gran helado.
Amorinos tiene unos precios similares, pero los helados son de otra galaxia comparado con estos. En La Romana no he estado y no puedo opinar.
Por cierto, en Amorinos con precios parecidos te llenan las tarrinas o el cucurucho hasta rebosar (y encima con formas curiosas), en cambio aquí te ponen una triste bolita de helado que da penita...