Gracias vicem por recordarme de Virgen del Cortijo. No he ido simplemente porque me da pánico entrar allí ya que es una ratonera y el parking imposible para dejar el coche. Otro día cuando tengo un poco más de tiempo lo exploraré.
Al final llevé las botas a una zapatería que encontré en la Avendia Virgen de Carmen en Hortaleza. Ya os contaré qué tal. De momento contenta ya que el joven que me atendió era muy amable y el coste de la reparación me parecía más que razonable.
Saludos!