Anoche estuvimos cenando allí, ya que mucha gente lo había puesto tan bien y nos encanta la comida asiática que allí fuimos.
El local es super amplio, había muy poca gente. La verdad es que tardaron bastante en tomarnos nota y servirnos. La comida estaba riquísima, tenía mucho sabor (aunque en el primer plato se equivocaron y tuvimos que esperar a que nos lo rectificaran). El precio acorde.
Cuando nos trajeron la nota para pagar, nos dimos cuenta que nos habían cobrado una tarta que no habíamos pedido ni tomado (no pedimos postres).
Cuando salimos a la calle, nos sorprendió ver que los pedidos a domicilio los sirven en coche (normalmente van casi todos en moto) y nuestra sorpresa fue mayúscula fue cuando vimos que junto a la bolsa blanca con los tupper de algún pedido, metían una bolsa negra con basura!!!mezclan en el maletero la comida con la basura.
La verdad es que todo fue un poco raro, aunque aún así creo que les daremos un nuevo voto de confianza en otra ocasión.