Si en un bar ponen un cartel que diga: "Si eres de raza blanca, entras gratis. Si eres de raza negra, pagas 20€", entonces todos nos echamos las manos a la cabeza por la barbaridad.
Si cambias razas por sexos, lo vemos tan normal y como estrategia de marketing. Para mí, es igual de condenable.
Pero en España hay mucha hipocresía y hay cosas que se toleran "porque sí" cuando otras muy parecidas se condenan hasta el final.