Como mis hijos ya han pasado la fase de “cortilandias” y teatrillos en espectáculos-bombonera con butacas de ciertopelo rojo y montajes amateur, he comenzado una búsqueda de planes navideños para NEREN (Niños en Riesgo de Exclusión Navideña). Ya sabéis, estos peques que se creen mayores, que han visto a Melchor sin barba y que corren el peligro de pensar que esto de la Navidad es solo un invento del corte inglés. Mi reto es buscar planes para estimular su espíritu navideño sin pasar por caja. Bueno… o solo un poco.
Me gustaría compartir mi lista con vosotros y si alguno tiene algo que aportar, sería de una gran aportación para el foro, siempre escaso de buenas ideas sin pretensiones comerciales.
Este fin de semana hemos visitado (¡por fin!) uno de esos pop ups navideños tan de moda. A ver, en realidad son mercadillos navideños de toda la vida, pero embutidos en esta moda de cambiarle el nombre a todo, para hacerlo más trendy… (ya sabéis a los autónomos de toda la vida ahora les llaman emprendedores y a la pequeña y mediana empresa, start up). Pues bien, yo he estado en The Hovse, que está genial, sobre todo si te gusta la decoración navideña… hay también propuestas para los niños y todo en un ambiente super estimulante. Tengo pendiente el de Serendipia en el hotel Las letras ¿alguno ha estado?, solo el nombre me parece de lo más evocador y por supuesto, una cita obligada es el de Federica & CO que es una de las tiendas más chulis de Madrid.
Si seguimos con los mercadillos (de los guays, aquí no hay sitio para los mercados medievales, que son ese gran timo de los tiempos que vivimos), en el Conde Duque podréis encontrar la Feria Internacional de las Culturas, que creo que para estas edades es muy interesante y didáctico. Para los más comodones y que no quieran alejarse del barrio, en Diversia hay una serie de talleres navideños para niños, pero solo hasta 9 años, aviso.
Tras la polémica de si este año con el nuevo consistorio iba a haber belenes o no (yo no me meto ahí), os propongo varios, la mayoría los conozco bien y son realmente chulísimos. El que más me gusta es el de San Lorenzo de El Escorial, que puede ser la excusa perfecta para salir extramuros de Sanchinarro (a algunos sé que os cuesta casi como traspasar la barrera del sonido) y respirar ambiente navideño de verdad: figuras a tamaño natural y un pueblo precioso.
El año pasado descubrí el belén del Museo de Madrid y os lo recomiendo encarecidamente: es napolitano, una obra de arte y encima enmarcado en un precioso museo muy instructivo para los niños. El belén de la Iglesia de San Ginés es muy especial para mí que soy un poco friki del barroco, en este caso sevillano y con cita obligada (antes o después) con una ración de churros en la chocolatería más famosa de Madrid. Este año no me gustaría perderme el de Jerez de los Caballeros, que es el más grande del mundo… pero con lo mal que vienen este año las fiestas navideñas en el calendario lo tengo un poco complicado. Pero os lo pongo por si alguno tiene ganas de irse a Extremadura.
Otra de las citas chulas para navidad con niños (y sin ellos) es pasarse por la pista de hielo de Colón. Pagas según el tiempo que estés (mucho mejor que el Palacio de Hielo en ese sentido) y me parece divertidísimo. Eso sí… tened en cuenta que los niños están divididos entre menores de once y mayores… por si los tenéis en esa franja y queréis estar juntos.
Este otoño he empezado a coquetear en plan familia con los brunch dominicales. Son una idea también genial para las fechas navideñas. Decía Santa Teresa que Dios también está en los pucheros… pues bien, ¿por qué no buscar el espíritu navideño en la gastronomía también? La ciudad está preciosa en Navidad y pensar en una mañana de domingo sin prisas, sin quehaceres (y sobre todo… ¡¡¡¡sin cita con abuelos para comer!!!! jajajajajaja *) en un precioso bufé todo incluido (mi hijo flipa en esos sitios… los camareros, también flipan con él). (*nota: Perdonad los amantes de los planes abuelo-dominicales… yo soy un poco talibán de esa costumbre tan enraizada. Mis hijos tienen los mejores abuelos del mundo y tienen tiempo de calidad con ellos, pero siempre me ha parecido asfixiante calendarizar las reuniones familiares en casa de los padres/suegros. Pero bueno es mi opinión y aquí cada uno tiene que ser feliz con lo que le guste).
Sigo con el rollo brunch… pues bien, si vuestros hijos son de ir a sitios específicos de niños, os recomiendo el del hotel silken (el de los colorines de avenida américa) que está muy adaptado a ellos. Si vuestros niños están en esa fase de querer ser mayores, nada como un sitio un poco menos adaptado… no hace falta llevarles al del palace (sobre todo por el precio, que no es por ganas de irme a un brunch&opera, en primera línea de mi whist-list incalcanzable), hay sitios como el Pipa&CO que hará las delicias de vuestros vástagos. De allí ellos saldrán sintiéndose más mayores (será por aquello del “cuando seas padre comerás huevos”… benedictine) jajajaja.
Dejo para el final mi cita favorita para esta época. La expo de Cleopatra en el Canal. Si no habéis ido… ya estáis tardando… menos Dickens y más Historia de verdad... que la Navidad también es un momento para compartir cosas con los niños que están ávidos de saber. Muchos museos de madrid hacen actividades especiales por navidad, miradlas que seguro que alguna se adapta. También (aunque no es navideño) merece la pena pasarse por el museo del Aire, el primer domingo de cada mes además hay exhibiciones.
Me quedan las recomendaciones musicales… los conciertos navideños y coros… considero que son esenciales para que nuestros hijos entiendan que no todo es Mariah Carey en Navidad… pero creo que con este post ya he puesto la primera piedra (pedrusco más bien, pestiño… quizá), así que ya me callo. A ver si compartís vuestros planes chulos con niños (o sin ellos) para reavivar el espíritu navideño.