Pues nada, que al final fui un temerario y lo llevé haciendo caso omiso a vuestros comentarios.
La cosa era de poco (cambiar aceite), por eso me decidí llevarlo por proximidad.
Total, que le dije que me echaran un aceite determinado (que lo tenía allí en la estantería), y me echó otro, que sería el que mejor le convenía a él.
Voy al día siguiente a decirselo, y me comenta que es igual. Yo le insisto y le digo que si le he pedido un aceite determinado que lo tiene en el taller, que por qué me echa otro. Y me sigue diciendo que es igual (vamos, que no se bajaba del burro).
Al final recordé una frase que me dijo un mecánico de mi anterior barrio: "cambiarás de mecánico pero no de ladrón"
Pues ya conozco un sitio donde no volveré a ir, aunque no entenderé nunca porque siempre está lleno de coches el puñetero taller!!!
Saludos a tod@s