En un lugar de Navalcarnero de cuyo nombre no deseo acordarme, existe cierto ser grotesco de si, que en una comunidad de propietarios de este vecino lugar dice llamarse vecino por calentar el sitio donde cohabita con una vecina propietaria respetada por sus vecino menos por el individuo que mora algunas veces con él y a horas más bien nocturnas. Este mortal, rara avis único en su especie y que dice ser hombre de “güebos” de los pies a la cabeza, realizó alardes acrobáticos adornados de música tamborilera en el espacio comunitario con “charquito” incluido (según este personaje), piscina, hace ya casi tres mese sin que nadie haya mediado nada para subsanar este error de la naturaleza…¿Quién debe responsabilizarse de las acciones de este niño de teta?¿Qué persona responsable en su sano juicio debe recordarle que existen estatutos que prohiben semejantes espectáculos circenses, propios de un payaso-acróbata de tintes tarzanescos? Por favor que alguien haya algo para que este paparazzi de tres al cuarto reciba su exclusiva, pues parece que se aburre como un mono.
Nada de lo dicho anteriormente es un insulto y no incumplo las normas de la Web, pues es la verdad de lo que ocurrió con un vecino en la comunidad de propietarios sita en Navalcarnero si alguien pudiera ayudarme respondiéndome que hacer se lo agradecería