1. Si es por falta de mantenimiento (atasco en el sumidero...) o por alteración de la superficie incidiendo en el sistema de aislamiento (taladro del suelo para colocar pérgolas...) tiene que pagarlo el propietario de la terraza.
2.- Si es por defectos de los materiales empleados durante los tres primeros años lo tiene que pagar la constructora,
3.- En el resto de los casos tiene que pagarlo la Comunidad.