La instalación de calderas y sus sistemas de evacuación de gases deben cumplir con la normativa técnica vigente en tu país o región. Se debe cumplir con el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios (RITE) y la normativa específica de gas (ITC-ICG 07).
Distancias y Ubicación: La normativa puede especificar las distancias mínimas a respetar entre las salidas de humos y otros elementos del edificio, así como la altura y ubicación adecuada para asegurar una correcta evacuación y evitar riesgos de acumulación de gases peligrosos.
En edificios sometidos al régimen de propiedad horizontal, cualquier modificación en elementos comunes (como el patio de luces) generalmente requiere la aprobación de la comunidad de propietarios. Esto suele ser discutido y aprobado en una junta de propietarios.
Si los vecinos de la finca colindante ya tienen instaladas extracciones de calderas en el patio compartido y no ha habido quejas, podría argumentarse que existe un precedente que podría facilitar la aprobación de tu solicitud.
Si el patio de luces es mancomunado, su uso debe estar regulado por las normas de la comunidad y cualquier uso específico (como la instalación de tubos de extracción) debe ser consensuado.
Las normas específicas de la comunidad pueden permitir o prohibir ciertos usos de los elementos comunes. Revisar los estatutos de la comunidad y los acuerdos previos es crucial.
Si se percibe que la negativa a permitir la instalación de tu tubo de extracción se basa en razones arbitrarias o discriminatorias, podría considerarse un abuso de derecho. Sin embargo, demostrar esto requeriría evidenciar que la prohibición no está justificada por razones técnicas, legales o de seguridad.
En caso de desacuerdo, podría ser necesario mediar o llevar el caso a la junta de propietarios, y si es necesario, a instancias legales para resolver el conflicto de acuerdo con la ley y los estatutos comunitarios.
Consulta con un técnico especializado o un instalador autorizado para asegurarte de que tu propuesta cumple con toda la normativa técnica y de seguridad.
Revisa los estatutos de la comunidad de propietarios y los acuerdos previos relacionados con el uso del patio de luces.
Presenta una solicitud formal a la junta de propietarios detallando tu propuesta y asegurando que cumple con la normativa.