En general, no se recomienda enjabonarse el pelo o el cuerpo en las duchas que están ubicadas junto al vaso de la piscina. Hay varias razones para esto:
Higiene y salubridad: Las duchas junto a la piscina están destinadas principalmente para que los usuarios se enjuaguen antes de entrar al agua, eliminando sudor, cremas solares y otros productos que puedan contaminar el agua
El uso de jabón o champú en estas duchas podría provocar que estos productos lleguen al agua de la piscina, afectando su calidad y equilibrio químico.
Normas de uso: Aunque las normas específicas pueden variar según la comunidad de propietarios, generalmente se establece que las duchas cercanas a la piscina son para enjuagarse brevemente antes y después del baño, no para un aseo completo
Instalaciones adecuadas: Lo más común es que las comunidades de propietarios dispongan de vestuarios o duchas separadas para el aseo personal completo, incluyendo el lavado de pelo
Respeto a los demás usuarios: El uso de las duchas para enjabonarse podría obstaculizar su uso por parte de otros vecinos que deseen enjuagarse rápidamente antes de entrar a la piscina.
Es importante tener en cuenta que cada comunidad de propietarios puede establecer sus propias normas de uso para las instalaciones comunes, incluyendo la piscina y las duchas. Estas normas deben ser aprobadas por la junta de propietarios y estar claramente visibles para todos los usuarios. Le recomiendo que consulte el reglamento interno de su urbanización o pregunte directamente a la junta de propietarios sobre las normas específicas para el uso de las duchas de la piscina. Si no existe una norma clara al respecto, podría ser un buen tema para discutir en la próxima reunión de la comunidad y establecer una regla que todos los vecinos puedan seguir. Recuerde que el objetivo principal de estas normas es garantizar la higiene, la seguridad y el disfrute de todos los usuarios de la piscina comunitaria.