Poco se puede decir al respecto del poder de convocatoria que generan las reuniones de vecinos pero lo que no es discutible es que la abogada, nos guste o no el resultado, hizo su trabajo y por ello debe de cobrar. No entro a valorar si éramos o no conscientes de que las cosas tienen un precio porque es evidente que aquí somos muy de sentarnos a la mesa a comer el plato más caro y después echarnos las manos a la cabeza cuando llega la factura, tampoco voy a valorar si la presidencia anterior hizo de su posición, por los poderes otorgados por todos no lo olvidemos, un ranchito particular de decisiones mal escogidas. Quizá si fuéramos un poco menos "holgazanes" y asistiéramos a las reuniones de vecinos podríamos votar lo que realmente queremos y no ponernos en manos de la minoría que se convierte en mayoría por el simple acto de "perder" unas horas de su tiempo en lo que creen que es importante asistiendo a las reuniones.
Después lamentarse no cuesta tanto, evidentemente cuesta menos que asistir a las reuniones de vecinos………