Bueno, prometí contar cosas. La verdad es que la llegada no fue muy agradable. ¿Motivo?. La de siempre. La Srta. Julia estuvo más desagradable y maleducada que de costumbre. Dadas las horas de visita que nos habían puesto, tuve algún problemilla y llegué 5 min. tarde, y de manera bastante grosera me dijo que ella estaba esperando. ¡Como si no llevásemos tiempo esperando nosotros...!. Pero la verdad es que después mereció la pena. El piso está muy bien acabado, no tiene casi ningún desperfecto, excepto minucias, como algo de pintura y alguna rayita en el suelo, pero cosas prácticamente imperceptibles. Yo había cambiado las puertas, y la verdad es que me alegro, porque son preciosas. Mi casa es de 2 dormitorios. Otra sorpresa agradable fue el baño, ya que me pareció precioso, y muy grande. Los azulejos, igual que los de la cocina, quedan muy bonitos. Lo único los sanitarios, que son bastante corrientitos, el labavo es pequeño, pero nada de importancia. Además, según el plano que yo tenía, la caldera estaba dentro de la cocina, ocupando mucho espacio, y me encontré con que la habían sacado al tendedero, con lo que queda mucho mejor. Las zonas comunes es a lo que más les falta, pero también me imagino que eso va mucho más rápido.
¡Ah!, se me olvidaba. Las viviendas tienen luz y agua, así que llevaros alguna bombilla, sobre todo para ver los baños, aunque allí te dan una linterna.
Bueno, no se me ocurre nada más que contar, excepto que queráis saber algo concreto y pueda contestaros.
Pero ánimo, que creo que nos van a quedar unas casas preciosas.
Los ascensores también son muy bonitos, igual que el portal.