Hace poco más de una semana que aparco mi bicicleta en el garaje. Hoy, cuando he llegado, he visto el piloto trasero roto, arrancado de su lugar y depositado en la cesta de la bici con la luz encendida (va a pilas).
Es lamentable que haya personas que se dediquen a realizar estos actos vandálicos, pero peor aún es que sea un vecino pues de este modo se quebranta la confianza que pudiera tener en los integrantes de esta comunidad.
Hago público este hecho por dos motivos: uno, para que todos los vecinos sepan que existe alguien tan ruin y despreciable en nuestro entorno comunitario; y dos, para comunicarle a esa persona en particular que si necesita un piloto, sólo tiene que pedírmelo y yo se lo regalo. Aunque quizá la necesidad no sea el motivo que le ha empujado a cometer semejante acto, a saber...
Saludos