La decisión por los precios de venta se tomó - correcta o incorrectamente - por el conjunto de la cooperativa, incluyendo aquéllos que por no haber pagado no tenían intereses sobre los locales.
A la hora de revisar esa decisión, los que la tomaron (repito que correcta o incorrectamente, pero fue así) tienen que ser consultados.
La trampa, trampa de dimensiones estratosféricas si se confirmara, es dar por supuesto que la ausencia de voto es un voto positivo, cuando además la decisión aterior no se tomó así, sino por voto afirmativo, pero no es trampa consultar a la C2B, puesto que ellos sí que tomaron la decisión previa y, que yo sepa, nadie ha impugando aquella votación por haber conmtado con ellos. En efecto, la trampa de suponer como positiva la ausencia de voto se hace mayor aun por estar involuicrados un grupo que le trae sin cuidado los precio, por lo que será natural que no se vayan a molestar en enviar un fax, pero eso no implica que, aunque no parezca lógico, ellos deban ser consultados tanto como lo fueron en el momento de la votación original.
Otra cosa que me llama la atención es que TAU no figura en la carta enviada, sino el consejo rector. Por tanto, si queréis identificar al tramposo, hay que afinar la puntería. Con todo, TAU, que ha salido bastante bien parado de todo el asunto de los locales sin que destaque por la calidad de sus servicios de vendedor, bien podría haber asegurado la legalidad de una propuesta antes de que fuera enviada.