La maldad es un cáncer que corroe por dentro a muchos seres humanos. ¡Que pena! Yo sigo manteniendo mis buenos deseos para todos: que se solucionen los problemas de todos como cada cual desee, que sigan SU camino sin perturbar el mío, que sean felices y dejen a los demás serlo a su manera. Y sobre todo, que dejen de interferir con malos modos y deseos en la vida de los demás. Alguien muy sabio dijo hace muchos años: trata a los demás como quieras ser tratado. También dijo: AMA AL PROJIMO COMO A TI MISMO. Sé que esto es muy difícil ; pero por lo menos el respeto por los otros y no desear ningún mal a nadie. Es una buena medida, porque las maldades que deseamos a otros "siempre, siempre se vuelven contra quién las deseó". ¡Mira que desearnos la cárcel! De verdad que cada uno a la larga se califica solito. SIN PALABRAS.