A estas alturas del culebrón que hemos vivido y que estamos viviendo no creo que a nadie le quepa la menor duda de que mientras el grupo municipal que actualmente gobierna nuestro pueblo siga sentado en la poltrona, con el señor Fernando Garcinuño a la cabeza, las cosas van a seguir exactamente igual o peor, porque ha quedado sobradamente demostrado a lo largo de los tres años que hemos estado esperando la LPO y en lo que va desde que se la ha dado a la II fase, que su voluntad de hacer cosas, de prestar servicios o simplemente y como es su deber de gestionar, es inexistente.
Tres agónicos años en los cuales la potabilizadora se había convertido en la caja panacea, y sin la cual era poco menos que impensable el que pudiese conceder el tan ansiado documento.
Pues bien, la potabilizadora a día de hoy, casi dos meses después de que se haya concedido la cedula, no se ha llegado a poner en marcha quizás, porque los costes de los filtros que son necesarios para el funcionamiento de esta deben ser asumidos por el Ayuntamiento, eso sí, a D. Fernando le ha faltado tiempo para publicar un bando en el cual se asegura que el agua es apta para el consumo, es curioso que en Zarzuela del Monte pueblo este en el cual el agua es suministrada por el mismo acuífero, el bando que cuelga de los tablones del Ayuntamiento diga totalmente lo contrario.
Es curioso, de igual forma, que las zonas verdes se estén abandonadas hasta el punto de que en la actualidad supongan un potencial riesgo de incendio ya que en la actualidad es un pastizal seco, que crece a su libre albedrío.
Y estos son solo alguno ejemplos de la política de no inversión y no prestación de servicios con que el actual grupo municipal se ha conducido, se conduce y es previsible que lo siga haciendo en el futuro.
Es por este motivo por el que yo me voy a empadronar como ciudadano de Ituero y Lama, porque pienso que es inexcusable un cambio de rumbo en la política que D. Fernando ha seguido a lo largo de los años, y no son pocos.
En mayo del año que viene tenemos la oportunidad de darle la vuelta a la tortilla, pero para ello es necesario desbancar del sillón del tedio, de la inoperancia y del pasotismo a quien lo ocupa en la actualidad, pero para ello es necesario que todos los que podamos nos empadronemos y con nuestro voto hagamos ver que queremos dar un cambio drástico a las políticas basadas en el inmovilismo y la desidia.
Amigos y amigas yo me voy a censar y espero, por nuestro bien que muchos de vosotros sigáis mí ejemplo.