Ir por lana y salir trasquilado
Sobre la historia o historietas que dio lugar a esta expresión, hay quiénes opinan que lo de “volver trasquilado”, hace alusión a la antigua pena de trasquilar a cruce, es decir, sin orden, cruzándose las tijeretadas al modo con que se trasquilaba a las ovejas, pena que se aplicaba a los blasfemos y judíos. A esta pena, le llama el Fuero Juzgo “esquilar laidamientre”, y el Concilio IV de Toledo, turpiter decalvar.
No obstante esta opinión, existe una, mucho más antigua, según la cual, el proverbio que comentamos alude al carnero que se mete en rebaño ajeno y vuelve al suyo trasquilado.
En la crónica general, del S XIII del 1541, c.709:
“Fue y (allí) engannado, ca le contesció, segundize el proverbio, como al carnero que va a buscar la lana ajena et viene dallá trasquilada la suya”
El maestro Correas confirma esta alusión al incluir en su “Vocabulario de Refranes”, uno que dice así: “el carnero encantado que fue por lana y volvió trasquilado”
(Fuente: “El porqué de los dichos” de José María Iribarren)
Son muchos los dichos que enriquecen nuestros idiomas. Así el ínclito Sr. Garcinuño, por dos veces solicitó inspección calificadora en Sanidad de Castilla y León, sobre el uso de la piscina, con clara intención de escamotearnos su disfrute, y resultó por dos veces, informes más que favorables (instalaciones excelentes)
Nótese que la Junta de Castilla y León, está gobernada por el respetado PP y a cuyas dos inspecciones agradecemos su presencia y dedicación.
Deseamos asimismo la pronta curación del pié de una de las inspectoras atendidas “in situ” por nuestro capacitado y solícito socorrista.
Mejor descanse Ud. Sr. Garcinuño. Sería bueno que los habitantes de “su” pueblo (incluidos los barrios), le relevásemos de su gloriosa misión de salvar a su pueblo. ¡No detenga el devenir de la historia, no obstruya el progreso, no fastidie a los “suyos”, no deseamos hacer leña del árbol…….derribado por la democracia!
¡Descanse y permita que otros hagan lo que usted no quiso hacer!