Es un horror como tenemos el parque donde se encuentra la antigua iglesia. Aparte de no estar cuidado, estar sucio e incluso peligroso para los niños, hace unos meses se ha hecho una inversión para instalar una pista de patinaje que se ha dejado a medias y donde supongo que los fumadores de droga que frecuentan el parque poniendo la música alta hasta la madrugada, dejando cascotes de vidrio roto y haciendo grafitis serán felices. Para los padres de niños pequeños que queremos pasear por la zona, es francamente incómodo.