Mira Sicario, vamos por partes, he leído tus antiguos correos en los que mencionas que no puedes dormir por culpa de unos cuantos que se pasan la noche de charla, y además con los niños tocando las narices y jugando a la pelota. Estoy totalmente de acuerdo contigo en que eso tiene que terminar, mis ventanas no dan al interior, pero entiendo que no hay nada más molesto que no te dejen descansar y que al día siguiente madrugues para trabajar. También te entiendo cuando dices que no quieres bajar a llamar la atención a nadie porque no quieres enfrentamientos personales, a mi me pasaría lo mismo, no hay que crear malos rollos entre los vecinos. Creo que una buena medida es llevarlo a una reunión. Hasta aquí conforme.
Ahora bien, no estoy de acuerdo contigo en el tema de los bancos en el parque. Mira yo tengo niño, y a mi me viene muy bien poder sentarme un poquito por la tarde mientras juega en el parque, y no de pie como un pasmarote. Bastante cansada llego de trabajar como para encima aguantar una hora (que es lo que suelo estar) de pie. Además creo la zona del parque infantil hay que terminar de vallarlo para que no exista peligro de que los niños salgan hacia la zona de los coches. Es cierto que los padres debemos estar pendientes en todo momento, pero quien evita el peligro, evita el riesgo. Por ahora y hasta que no se coloquen un nuevo vallado, los bancos están haciendo una doble función, descansar a los que llegamos echos polvo, y evitar que los enanos salgan hacia la zona de garajes. Ya se que pensarás que hacen otra función más que es la de alojar a los vecinos nocturnos en sus juergas, pero la solución no es quitar los bancos, la solución es mandarles a su casa o hacer que se comporten (esto último dudo mucho que sean cápaces)
Tampoco estoy conforme contigo en el comentario que haces acerca de las lamas, no puedes votar en contra solo por el hecho de que no puedas dormir, creo que son cosas diferentes y que no podemos pagar todos por el problema de unos pocos y por la mala educación y falta de civismo de unos cuantos, que por lo que veo y leo, sonlos de siempre. Ya cuando el año pasado llegamos a vivir, apuntaban maneras y siempre había corrillos con los mismos, que parecían que estaban organizando todo, "y a todos".
Un saludo