Yo también compré mi parcela a Cuchareta, por el mismo precio = tamaño. Es cierto que su gestión comercial es del todo surrealista. Por este motivo en dos ocasiones consecutivas me eché para atrás en la operación. No os podéis imaginar lo que indague antes de aventurarme a cerrar el negocio: hablé personalmente con el Registro de la Propiedad de Sepúlveda, solicité nota simple. Hablé también con la Notaria, con la Administración por supuesto. Le requerí copia de su contrato de compraventa, etc...Aún así sentí una inquietud horrible, porque tenía la sensación de que en esta operación algo, cualquer cosa podría pasar. Pero nadie me obligó a cerrar la operación, pagué lo que estaba dispuesta a pagar por lo que quería. Accedió, no se si de buena o mala gana, a mis requerimientos, pues los hice con firmeza y razonadamante. Me prometió pequeños detalles, pintarme la valla, plantarme algunas plantas, podarme, empedrarme el camino, que ni si quiera voy a recordarle, pues son detalles que carecen de toda importancia, y además prefiero hacerlo yo a mi gusto. En definitiva, compre la parcela que me gustó, la que quise comprarme, ni si quiera tuvo que hacer un esfuerzo para venderla, se vendió sola. Creo que de esto se trata cuando realizas una operación de compra-venta, adquirir lo que te gusta al precio que puedes pagarlo. Si condicionas la operación a peticiones irrelevantes para compensar el desembolso es que realmente no estás convecido de lo que quieres y tal vez ni si quiera te gusta lo que has comprado.