Hace varios días al acceder por la puerta de entrada del parking, se me vino encima el portón, de manera literal, no me calló encima por segundos, un auténtico peligro, por lo visto según me comentó uno de los vigilantes el tornillo que sujeta los portones va atornillado y tiende a destornillarse con el paso del tiempo.
Habrá que buscar una solución porque cualquier día se le puede venir encima el portón a cualquier propietario, el portón cae por su propio peso sin ningún impedimento, los daños pueden ser considerables para el vehículo o los ocupantes. Se supone que tenemos una empresa de mantenimiento que debería de preocuparse del mantenimiento adecuado de los portones y sobre todo de la seguridad.