Buenos días. El tema de la hipoteca que financia a nuestra promotora la construcción y que ha firmado con La Caixa viene exhaustivamente recogido en el contrato de compraventa que firmamos con Progeinsa, por lo menos en el mío, y si no recuerdo mal porque hace tiempo que no me lo leo (da un poco de miedo), ya nos hemos subrogado en la citada hipoteca en el momento de firmar el contrato privado, por lo menos eso es lo que hemos aceptado como forma de pago.
Por lo poco que recuerdo, existe una claúsula en el contrato en el que como forma de pago aceptamos la subrogación en la hipoteca del promotor, aunque existe otra cláusula en la que podemos no subrogarnos o reducir el importe de la hipoteca (siempre con la Caixa, claro). Qué ocurre: que si no nos subrogamos o reducimos el importe que queremos de hipoteca, tenemos que pagar a Progeinsa creo que era en tres plazos el importe de la hipoteca o de la reducción que quisiéramos. Todo esto se debe a que no han distribuido la hipoteca entre cada finca, y en noviembre querrán hacerlo en función de lo que les digamos cada uno de los compradores.
Desde mi punto de vista la situación para cambiar de Banco antes de la entrega de la vivienda está complicada, primero claro está, por una cuestión económica: si tengo que pagar todo a Progeinsa necesito financiación, pero como no tengo casa que hipotecar todavía no me la van a dar. Y segundo, hemos firmado que nos subrogamos como forma de pago del precio del piso, y eso, jurídicamente, es lo que hemos aceptado.
A efectos prácticos tenemos dos posibilidades: Primera, cuando llegue la entrega de los pisos tener convenido con otro Banco una hipoteca mejor para cancelar la de La Caixa. Cuál es el inconveniente: que los gastos de constitución de hipoteca son un disparate y que los gastos de cancelación de la hipoteca de La Caixa nos los comemos (otra cosa es que luego reclamemos esos gastos judicialmente o en algún tribunal de arbitraje, y lo ganemos), pero también hemos firmado en el contrato que dichos gastos serán de cuenta del comprador (ya se que es ilegal, pero a priori nos los tragamos).
La segunda opción, que es la más diplomática es la siguiente: nos subrogamos en la hipoteca de la Caixa que durante el primer año no está mal económicamente y comenzamos ha negociar con otros Bancos la subrogación de la citada hipoteca de la Caixa, y si encontramos mejores condiciones la Caixa debe al menor igualarlas, de lo contrario la subrogación se llevará a efecto con el nuevo Banco y los gastos son mucho más bajos que la constitución de una nueva hipoteca.
Por último y para no aburriros, os diré que hemos tenido suerte en una cosa, La Caixa a partir del año pasado solo financia promociones mediante Créditos hipotecarios, no préstamos, por lo que los nuevos adquirentes no pueden subrogar la operación con otro banco porque los beneficios fiscales de la subrogación solo afectan a los préstamos y no a los créditos. Vamos, que se van a hacer con el pais.