Algunas cosas
¿Cómo está la seguridad en la finca?
623 lecturas | 5 respuestas
Desde que nos han entregado los pisos ya nadie parece tener el menor interés por este foro.
No obstante, por si queda algún fiel por ahí, envío algunas consideraciones sobre lo visto, oído y sentido desde el día 27 de julio.
No tenemos ninguna seguridad. Ya han robado, parece ser, uno de los puntos de luz del pasadizo de correos. No me explico qué hacen los trasteros dando directamente a ese lugar sin ninguna protección y al alcance de cualquier desaprensivo que quiera darles una visita. Faltan cerramientos, faltan llaves, falta seguridad. Hasta que no se cierre la finca por todos sus lados, entrar por la puerta principal parece absurdo... A propósito, ¿sigue todavía el extintor de la zona común entre los portales de los Olmos?
Los porteros automáticos del bloque 1-A no funcionan. Puede hablarse por ellos pero no accionan la puerta del portal de modo que hay que bajar cada vez que alguien llama.
Los códigos del portal común no han sido instalados, por lo que, o está abierto día y noche o no habrá forma de que nos visiten. (Aunque parece ser que basta con pasar la mano entre las barras y tirar del cierre para conseguirlo.
La maravillosa puerta del garaje tiene personalidad propia. A veces no se abre hasta pasados más de dos o tres minutos... en ocasiones sólo se abre una mitad que no siempre coincide...¡De pena!.
Hay puertas blindadas que no cierran bien. Las ventanas están enfoscadas en silicona, algunos cristales están rallados.
Las reparaciones que en su día se solicitaron no han sido efectuadas y, para colmo, ayer, durante la Junta de vecinos, el representante de la EMV y seguidor de la obra durante su desarrollo, se comprometió a exigir los cambios necesarios...¡Patético!. Cuando debía haberlos hecho no los hizo y ahora, de repente, es nuestro valedor...
En los descansillos de la escalera hay unos armarios para instalaciones. Algunos no están cerrados y ni siquiera disponen de cerradura. Hay una caída libre de hasta seis pisos (tenemos un vecino invidente que casi se cae por uno de ellos y el representante de la EMV todavía, cínicamente, se permitía dudar de la veracidad del caso.
Pues bien, los niños no pueden usar el ascensor y las escaleras, con los armarios abiertos sin suelo, son un punto de curiosidad...muy peligroso. Milagro si no tenemos que lamentar alguna desgracia.
Por lo demás y, quitando tanta incompetencia, chapucería, falta de buena voluntad, incumplimiento de contrato y otras "minucias", algún día disfrutaremos de nuestra casa y, espero sinceramente, de nuestra comunidad.
Recibid un afectuoso saludo y, en la medida de lo posible, seguid escribiendo hasta que nos echen, de Pedro-Ignacio.