Hola de nuevo,
Si que es cierto que quitar las lamas (ya sea todas o unas pocas) va a afectar al aspecto final de la fachada.
Pero lo de poder hacer que las lamas sean basculantes cierto ángulo (sin quitar ninguna) no creo que afecte más al aspecto de la fachada del edificio que por ejemplo el hecho que cada vecino tenga las persianas de su casa más o menos subidas, o el que un vecino tenga unas cortinas verdes, otro amarillas y otro con dibujos o que otro ponga estores que se suben y bajan. O incluso, que uno decida dejar las ventanas abiertas, medio abiertas o cerradas.
El mismo hecho de poner ventanas en el tendedero, si nos fijamos bien, también se nota.
Si nos lo tomamos así deberíamos poner una norma que haga que todos subamos y bajemos las persianas a la misma hora y a la misma altura y que todos pongamos las mismas cortinas y del mismo color y que abramos y cerremos las ventanas todos a la vez, para que el aspecto de la fachada sea uniforme.
Creo que debemos ser un poco flexibles en ese aspecto para poder aprovechar más las posibilidades de nuestros pisos. Permitiendo instalar algún sistema de ese tipo el impacto en la fachada es mínimo (las lamas siguen ahí) y por la ganancia de luz creo que puede merecer la pena. Además (debido a que cada uno las podría girar a su gusto) puede ser una opción completamente voluntaria, el que quiera que lo ponga y el que no pues no.
Respecto al cálculo debo decir que lo del 29% y 50%, efectivamente se refiere solo ha una relación entre la parte opaca y la parte no opaca del tendedero. Es decir, que esa relación es independiente de que la luz que incide sea directa, oblicua, que este nublado o que esté dando la sombra.
El incremento de luz en la cocina siempre va a existir (al bascular las lamas), dado que la parte opaca se reduce. Otra cosa sería calcular la cantidad de luz que tenemos en la cocina, pero seguro que va a tener una relación muy estrecha con ese porcentaje.
El efecto es muy parecido a las persianas de lamas que se pueden subir y bajar, y cuando están bajadas las puedes girar desde una posición de cerrado (en la que casi no pasa luz) hasta una posición completamente horizontal. En las posiciones intermedias se puede ver perfectamente como aumenta y disminuye la luz en la sala independientemente del momento del día o de la cantidad de luz en el exterior.