Parad, tíos, parad, por favor.
Me estoy partiendo toda la caja (como dice el Fiti) en la oficina, y me están mirando con cara rara, jajaja.
Taros, Dabrah tiene razón, al final, hasta acaban acostumbrándose y no les importa que te tires pedos, jajaja.
Lo malo es que cuando llegas a ese momento de la relación, la confianza es tal que las cosas ya se ven más de color marron caca que rosa, jajaja