Qué pena! qué rápido se me ha pasado el verano. Y ya ver la piscina cerrada... qué pena!
La verdad es que este año hemos tenido un socorrista excelente, muy atento, trabajador, cumplidor con sus obligaciones... un encanto. Me uno a las felicitaciones de Royolu.
Pues nada a esperar al próximo verano, que también llega rápido.