Por lo que parece, se trata de una mera cuestión de prioridades: para la gente que tiene que abandonar su casa el martes 31, el hecho de que haya o no farolas es una simple anécdota. Los que no tienen demasiada prisa esperan que no haya ni un mínimo fallo. Y cada uno, lógicamente, hace la guerra por su cuenta.
En nuestra casa -entre otros muchos fallos- no han dado ni una con la carpintería de los armarios (puertas rotas, agujeros provocados por un tornillo mal colocado, etc.). Si yo tuviera que abandonar mi casa el próximo martes, seguro que me importaban un carajo las puertas de los armarios. Mi prioridad sería tener un techo. Afortunadamente, aún tengo un pequeño plazo para dejar mi casa al nuevo propietario (pagando, por supuesto, pero ojalá todo se pudiera solucionar con el pago de un alquiler). Si lo considero oportuno, puedo negarme a firmar hasta que Larcrea me entregue mi casa en perfectas condiciones. Pero claro, esto no frenaría la escrituración del resto de propietarios. Es mi problema.
Ahora bien, si se me ocurriera denunciar algo que afectara al conjunto de los vecinos, con el consiguiente retraso en la entrega, entiendo que todos aquellos que se encuentran en una situación casi dramática de quedarse sin casa en dos días se acuerden de mi familia al completo.
Estoy de acuerdo en reclamar todo aquello que consideremos oportuno y hacerlo de manera conjunta, como propone Miannoco. Sólo de esta manera será más fácil lograr algo positivo para todos, porque, de verdad, que me da la sensación de que en lugar de poner zancadillas a la promotora nos las ponemos entre nosotros.
Saludos,