No me pude quedar hasta el final (me fui justo después de tratar el asunto de las persianas y los toldos), pero mi impresión general fue buena.
Es más, me encantó la actitud batalladora de algunos vecinos -sobre todo la pareja que salió de voluntaria la primera, chapó- y creo que al administrador (que me pareció un tipo con bastantes "tablas") le quedó claro que o trabajan bien, o se quedan sin un peazo de cliente como nosotros.
Buen finde, vecinos :-)