Apetito chino por el ladrillo español
Hu Ning sopesó adquirir una vivienda en Estados Unidos, Reino Unido o Canadá, pero al final se ha decidido por España. Su mujer está a punto de irse a vivir a Barcelona, donde la hija de la pareja, de siete años, empezará en septiembre un nuevo curso en una de las escuelas internacionales de la ciudad. Hu permanecerá en Pekín unos meses más, a la espera de que se le otorgue el permiso de residencia para poner en marcha una empresa, y una vez en España buscará un hogar para la familia.
Publicada
9/8/2016
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El País