Hola, hola, hola,
Veo que empiezan a surgir las ideas, muy bien.
EVRYR, estoy de acuerdo con Frodo09 en que no siempre es posible justificar algún que otro defecto, pero eso sí, siempre se pueden "arreglar" sencillamente para que el posible incauto (quiero decir comprador) suelte la tela.
Pero vayamos por partes, primero intentemos tener explicaciones “lógicas” a los fallitos que mencionas:
1. Jambas agrietadas: Me gusta la idea de los stickers, están muy de moda y a nadie le sorprenderá que hayas podido utilizarlos. Para defender esta postura necesitarás poner cara de póker. Si no la tienes practicada, siempre podrás acudir a la primera de las técnicas que más adelante te explico.
2. Plaquetas rotas: El problema se resuelve siempre y cuando cambiemos la denominación. A partir de ahora ya no son “plaquetas rotas”, son “mosaicos modernos”. Es verdad, que para hacerlos más creíbles deberás romper varias más, intentado dar forma de corazón, por ejemplo, así también le darás un aire romántico. Eso es a lo que se llama “valor añadido”.
3. Rajas en el techo de la terraza y por encima de la parcela: Este defectillo casi indetectable por las personas, a menos que estés todo el día rogando al cielo o viendo si va a llover para que no se te cuele el agua por la puerta (lo cual nos ha pasado frecuentemente), siempre se puede justificar como un sistema de aireación pionero en Europa, que permite que la casa respire y los materiales aguanten por siglos (aquí debes contener la risa, es muy importante).
4. Movimiento del wáter por mal cerrado: Esta es muy fácil. En este caso podéis decir que el wáter viene de Japón ya que está diseñado para que los terremotos no afecten a la loza. En España no tendremos muchos terremotos, pero nadie te dice que tal y como han construido la casa, no se vaya a mover cual Torre de Pisa. Por lo menos te aseguras que no vas a tener grietas en la loza. Además, le estarás dando un toque exótico a tu casa (¡tecnología japonesa!).
5. Tapas del wáter degradadas, con aspecto de usado?: No lo dudes, no lo preguntes, por supuesto que tienen aspecto de usado, porque han sido usadas. Pero que esto no parezca negativo, sino positivo. Esta casa se ha usado, ha habido mucho amor por los cuatro costados, es un signo de tu felicidad (y del que venga, claro, esa es la idea).
Si estas explicaciones no las tienes bien ensayadas, siempre puedes recurrir a estas sencillas técnicas de reparación:
1. Fácil y barata es la "técnica de la silicona". Esta técnica viene reemplazando a la clásica "técnica del celo" y se basa en emplear silicona en vez de celo para todo defecto que se pueda encontrar. Todo conocemos al gran maestro de esta técnica, que por suerte hemos tenido "arreglándonos" los desperfectos. No conseguiremos resultados permanentes, pero nos servirá para aparentar una casa en condiciones. He de decir que los maestros de esta técnica emplean silicones de colores para que quede más profesional. El gasto es mayor si empleamos siliconas de colores o incluso comparado con la técnica del celo, pero merece la pena el esfuerzo económico si con ello conseguimos vender la casa.
2. También existen las técnicas del camuflaje pero en esto no te puedo ayudar ya que me libré de la mili. Pero seguro que el foro alguien te puede dar ideas en este sentido. Se trataría de aplicarlas no a tu cuerpo para pasar desapercibido, no, el posible comprador estaría desconcertado y se podría cabrear si no te viera por casa, sino que lo apliques a la casa para tapar estos “pequeños defectillos”. Una técnica similar es la del maquillaje para fiestas, que a lo mejor no esconden los defectillos, pero le dan un ambiente a tu casa muy alegre y fiestero. Yo aconsejo esta última para parejas jóvenes que vengan con una camiseta de Lady Ga-Ga.
3. También está la técnica de la “negación profesional”. Seguro que alguna vez la has visto, sino sufrido. En este caso necesitarás la ayuda de más personas. Creo que los vecinos te podremos echar una mano en esto. Se trata de que todo el mundo quede de acuerdo y nieguen la existencia de cualquier defecto en la casa, haciendo creer al posible comprador que es él el que está equivocado y que urgentemente debe ir al oculista. Es como el cuento del Rey desnudo ¿recordáis? Esta técnica tiene el inconveniente de que si el sujeto en cuestión (también llamado “timado”) no quiera firmar antes de ir al oculista. Entonces ahí ya no tendremos nada que hacer. A menos que entre los vecinos se encuentre un oculista, claro.
4. Muy extendida también es la técnica del “somos una empresa seria” o en su vertiente particular “soy una persona seria”. Recomiendo que para aplicarla vistáis elegantemente, con vestido si se es mujer y con traje y corbata si se es hombre, incorporando también cierto aire de ofendido, como “por favor, soy una persona seria”. De lo que se trata aquí es de prometer al comprador “por la gloria de Snoopy” que todo estos defectillos van a ser reparados antes de que les entreguemos las llaves. Obviamente, una vez firmado ante notario, cualquier promesa que se haya hecho no tenemos por qué cumplirla. Mucho ojo en tener estas promesas por escrito. Siempre tiene que prevalecer la buena intención del vendedor. También será recomendable cambiar de teléfono móvil y nunca, bajo ninguna circunstancia dar los datos de tu nueva dirección para evitar que se personen y que sean pesados. Al final, acabarán por ceder. Mucha gente conoce a esta técnica como la “técnica del desgaste”, pero soy de la opinión que esta última es una continuación lógica de la primera y ya no es tanto una técnica de venta, sino de postventa.
Y con respecto a cambiar tu chalé por otro de la fase nueva, no te lo aconsejo. ¿Por qué crees que hace tiempo que no se está enseñando el chalé piloto? ¿Será porque está de pena? ¿Cómo crees que está la tarima de la fase 2? Según dicen las malas lenguas, está más bufada que el pelo de Tina Turner. ¿Quieres arriesgarte a eso? Además, los han construido los mismos, así que no hay garantías.
Espero haberte ayudado. No dudes en preguntar todo aquello que necesites.
Un saludo