Cuando compré mi casa a esta promotora me aseguraron que eran profesionales serios. Después de casi 2 años desde la compra, puedo afirmar que mi experiencia no avala esta afirmación. Cuando tu nuevo hogar se está construyendo, con la inversión que eso supone, esperas, como mínimo, comunicación y seriedad. Tras un retraso muy importante hasta el inicio de las obras, durante el cual la información fue, en el mejor de los casos, prácticamente nula, cuando no incorrecta o diferente para cada vecino, comenzamos con el proceso de personalizaciones. Para empezar, en vez de hacer todas las elecciones el mismo día para todo, tuvimos que elegir unos elementos hace meses, y ahora nos convocan para los siguientes. Los sobrecostes para cualquier cosa que no sea su oferta básica, y BÄSICA es lo que describe la oferta, son rayando la estafa. Mala información una vez más, precios abusivos, nefasta gestión de la comunicación, materiales completamente básicos y en ocasiones no cumpliendo (como en el caso del mueble de baño, que debería de haber estado incluido de serie) la memoria de calidades. Inamovibles a ningún cambio ni negociación. Pensaba que había comprado una casa de acabados de lujo, me encuentro con que los acabados son muy muy básicos, y entre la oferta con elevadísimo coste que ellos ofrecen tampoco hay alternativas satisfactorias. La construcción es un mundo de abusos y atropellos a los derechos de los consumidores, y puedo afirmar que Amenabar es un claro ejemplo de estas prácticas. No recomiendo una compra con ellos, sabes lo que pagas, pero no lo que te van a entregar, y el camino está plagado de inseguridad, cabreos, engaños, mala gestión...desastre y mala voluntad unidos.