Por cierto, un asunto que sí que nos puede afectar a nosotros y que se está debatiendo estos días en el Ayuntamiento. La parcela es la que está cerca del punto de limpio. El "industrial" es Pedro Arias...
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Un industrial tramita la construcción de un pabellón en Arroyo para 20.000 personas
El proyecto cuenta con diez millones de inversión y el apoyo del alcalde, aunque PSOE y PP dudan de su viabilidad
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La iniciativa podría chocar frontalmente contra los intereses del Valladolid Arena.
Si con la llegada de Ikea y Decathlon o con la expansión de Hipercor alguien pensó que Arroyo de la Encomienda se daría por satisfecho, sin duda se equivocó. El municipio, que primero fue líder en lo que a expansión urbanística se refiere, se ha propuesto ahora apostar firmemente por la instalación de grandes superficies comerciales y pretende poner la guinda al pastel con la construcción de un gran auditorio que le permita entrar a formar parte del circuito de conciertos internacionales.
La presentación oficial de la idea tendrá lugar hoy mismo, en el transcurso de la comisión de Urbanismo programada en el Ayuntamiento, cuyos miembros se toparán por vez primera con un proyecto que, de salir adelante, conseguirá que Shakira, U2 o cualquiera de las estrellas internacionales de la música hagan parada, fonda y espectáculo en Arroyo de la Encomienda.
La iniciativa llega de la mano de dos empresas, Lavall XXI y Entorno Castellano, con el empresario Pedro Arias como ideólogo. El varias veces candidato a alcalde de Valladolid por Candidatura Independiente y promotor de la Ciudad de la Juventud en Fuensaldaña, ha sido el responsable de todas las negociaciones previas con el equipo de gobierno del municipio y el que más ha defendido su viabilidad.
Su poder de convicción radica en parte en los alrededor de 10 millones de euros que pretende invertir en la obra, a los que se suma además la cantidad necesaria para la adquisición de las cuatro parcelas del SAU-8 en las que se edificaría el complejo, un edificio en forma de barco y dividido en dos naves separadas por un espacio intermedio en el que se ubicará el restaurante.
La nave principal, con capacidad para 20.000 personas, se pretende destinar a las grandes estrellas y otra más modesta, para alrededor de dos mil, acogerá los conciertos de cantantes de menor renombre, pero de calidad. Todo con la intención de que Arroyo ofrezca espectáculos todos los fines de semana y que los empresarios amorticen su inversión. La sala de mayor tamaño será además un edificio multifuncional, en el que también tendrán cabida congresos, actividades culturales o lúdicas, exposiciones o incluso algún evento deportivo.
El alcalde de Arroyo, José Manuel Méndez, mostró «todo su apoyo a este proyecto». Para el regidor la idea es «muy buena y no generará problemas ni en cuanto a seguridad ni respecto al tráfico». Es más, Méndez destacó que el proyecto será «un nuevo vivero de empleo».
El diseño del recinto principal contempla pequeñas terrazas que descienden desde el acceso al fondo en el que se sitúa el escenario y cuenta, en la parte superior, con palcos que conforman el graderío. La sala pequeña consta de dos niveles de gradas y una pista inferior, conectada con el sótano y con acceso desde el atrio.
Pero para que todo ello sea una realidad, las empresas promotoras deberán primero ejecutar la compra de las parcelas que están en la manzana 20 del SAU-8. Concretamente, las de la calle Cibeles 7, 9, 11 y 13 ,que abarcan un total de 21.379 metros cuadrados.
Estos terrenos tienen actualmente la calificación de industrial general, por lo que la comisión de hoy estudiará, entre otras cosas, la modificación necesaria para hacer realidad el proyecto. El cambio tendrá que dejar que el plan parcial mantenga como predominante el concepto de industrial, pero aceptar como compatibles otros usos, como el de oficinas, comercios, exposición y venta, actividades deportivas o espectáculos.
Compra de suelo
Los promotores, sin embargo, no harán efectiva la compra antes de que el pleno municipal, que se reunirá este mismo mes, dé sus parabienes a la iniciativa. El respaldo político no será sencillo, porque el equipo de gobierno no dispone de mayoría absoluta y tendrá que recibir el apoyo del Partido Popular o del PSOE o, al menos, conseguir que alguno se abstenga.
Aunque de momento ninguna de estas dos formaciones ha adelantado su voto en la comisión de hoy, sí que han dejado claro que tienen dudas respecto al proyecto. En ese sentido el portavoz del PSOE, Ismael Bosch, indicó que estudiarán la iniciativa con «cariño», aunque dada «la importancia del proyecto -hablamos de unos 10 millones de euros de inversión- y dada su trascendencia, vamos a mantener una reunión del PSOE de Arroyo donde se analicen los pormenores. Mantendremos también consultas con la Dirección Provincial del partido, en aras de tomar la postura más correcta y que más pueda beneficiar a la provincia».
Bosch hizo hincapié en la necesidad de «estudiar si un proyecto de estas dimensiones puede tener cabida física y real en Arroyo, con unas infraestructuras viales de acceso al sector en el que se propone su instalación como las existentes, sin perjuicio del conjunto de todos sus vecinos».
Una duda a la que unen la relativa a la necesidad de crear «un plan de seguridad vial y ciudadana elaborado por la Policía Municipal, la Subdelegación del Gobierno y la Dirección General de Tráfico, que supervise y compruebe si la ubicación de este recinto es posible teniendo en cuenta los actuales accesos existentes desde la A-62 y cómo afectará a la movilidad y seguridad en la zona». En el punto de la seguridad el representante de los socialistas recordó que «Arroyo cuenta solo con diez agentes de Policía y para controlar la posible afluencia de 20.000 personas necesitaríamos más».
La portavoz del Partido Popular, María Ángeles Cantalapiedra, se manifestó en esa misma línea y recalcó que «tenemos muy serias dudas respecto a este proyecto». Sobre todo porque, en su opinión, «no entra en el concepto global de calidad de vida que nosotros defendemos para el municipio». La concejala añadió que, después de conversar de forma particular con muchos vecinos y afiliados del partido, «aún no he encontrado ninguna voz a favor de su construcción». Pese a ello, Cantalapiedra quiere que se la explique «al detalle» toda la documentación.
A ninguna de las formaciones políticas en la oposición les basta tampoco con el hecho de que los empresarios cuenten con el visto bueno inicial de las distintas administraciones para llevar a cabo su idea. De hecho, la Subdelegación de Gobierno, con fecha de 16 de abril de 2010, confirmó que la obra «no afecta a la infraestructura energética básica», y la Diputación de Valladolid informó que la obra «no afecta a carreteras ni a otros intereses» de la administración provincial, por lo que «no existen objeciones que plantear a su contenido».
En cuanto al cambio de calificación de los terrenos, el informe de la Comisión Territorial de Urbanismo de Fomento de la Junta dictaminó que no hay problemas, aunque dejó claro que debe «aportarse documentación suficiente justificando que se mantienen los usos globales del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y del Plan Parcial y que no implica una modificación puntual del mismo». Algo que se hizo con posterioridad por parte del Ayuntamiento de Arroyo y que obtuvo después el respaldo de la administración regional.
Hasta la fecha, los promotores y el Ayuntamiento han pasado todos los trámites burocráticos. Que el auditorio vea la luz solo depende ahora de una decisión política que, eso sí, puede estar condicionada por los intereses de otro gran proyecto: el Valladolid Arena.
La iniciativa de la capital no es exactamente la misma, porque contempla la construcción de un polideportivo multifuncional, pero sí tiene también como uno de sus puntos fuertes el de convertirse en sede para la celebración de macroconciertos y eventos de importancia. Si el proyecto arroyano sale adelante, el Arena podría verse muy comprometido, según algunas fuentes.
Y unas imágenes en pdf de la Diputación de Valladolid
http://www.diputaciondevalladolid.es/si/documentos/2010/septiembre/13/000OEIU4.pdf