Bueno, primero nos tendría que aceptar Alcobendas ¿no? Y dada nuestra patética falta de instalaciones y, por consiguiente, la necesaria inversión pública para remediarlo, yo, si fuera alcobendino, votaría que no. Y si fuera de La Moraleja, me tiraría de los pelos.
Lo que sí podríamos hacer es “alquilar” a los gestores de Alcobendas, las instalaciones que han construído están bien hechas, tienen sentido, tanto las gestionadas como las abiertas al público.