A ver...como este tema se ha tornado un poco fuerte permitanme, si tienen un poco de tiempo, contarles una historia:
En la comunidad en donde vivía hace unos años, unos inmigrantes vinieron a trabajar, traían la mano de obra especializada de sus tierras y la ofrecieron de buen agrado pues no tenían donde llegar, eran en su mayoría exiliados o huían de la situación de su país inmerso en guerra. Ciertamente estas personas no las pasaron muy bien, eran momentos difíciles, parte de la familia dividida y sin espectativas de regreso.
El nuevo país los acojio con brazos abiertos, sin embargo, en algunos casos, eran tildados con motes y burlas despreciativas, de cualquier forma, hicieron oídos sordos y continuaron su labor, para poder surgir ellos y para sacar adelante a la nueva patria que ya sentian como propia. Tuvieron hijos, que, como bien lo decía el profesor, se integraron...hasta que comenzaron a crecer y, al percibirse las diferencias étnicas, los otros chicos comenzaron a tomar las actitudes de sus padres "locales".
Estos niños crecieron haciendo de la nueva patria, su patria...dando lo mejor de si al igual que sus padres inmigrantes y de la misma forma que estos, omitieron el racismo y la xenofobia y continuaron con su trabajo y sus principios...
Tiempo después, la situación de ese nuevo país empeoro y no quedo otra que retornar a la antigua tierra...a la tierra de la cual llevaban la sangre...pues aunque nacidos en la nueva, solo tenían de esta el acento y algunas costumbres...y al llegar al terruño, se consiguieron que, el mismo ya tampoco parecia pertenecerles, pues en la antigua patria, en la patria de sus padres, tampoco se les recordaba pues eran ahora ellos también extranjeros. Introducidos en una capsula del tiempo, habían escuchado historias, costumbres y anécdotas de un país que había evolucionado y que ahora los desconocía y que al parecer se había completamente olvidado de ellos.
En este punto, pongamosle nacionalidad a las patrias de la historia...pues no es ni áfrica ni el oriente medio las protagonistas:
España fue, por mucho, la nación que mas emigrantes exporto al mundo, específicamente a latinoamerica y en el caso de esta historia a Venezuela. Esos padres fueron los míos, y yo, junto con mi esposa (portugueses en su caso) me ha tocado "retornar" a esta tierra. Soy español, por que así lo dice mi DNI y el "conteo" genético de mi ADN así lo indicaria...sin embargo, si me escucharan hablar dirían: O es Colombiano...o es Argentino...o quien sabe que otras cosas y nacionalidades mas. Lo cierto es que, pocos acertaran y no dirán ciertamente quien soy:
Soy el hijo de inmigrantes españoles, que huyeron de una guerra de hermanos contra hermanos y del hambre, para sembrar un país.
Fui la esperanza, junto con muchísimos "paisanos" mas, de un país amigo, amable, y enormemente rico, que nos abrió sus puertas y creyó en nosotros.
Soy la sombra de un futuro no alcanzado por el olvido y el desagradecimiento de un gobierno de turno.
Soy el hijo de una madre que cantando Sardanas me arrullaba.
Soy el mismo hijo que vio la ultima luz en los ojos de esa madre y en lo mas profundo de ellos percibio el color y la luz de una España en primavera, pero que en instantes me dejaron en el alma el mas profundo de sus inviernos
Soy los restos de las cenizas de los míos que, atraves de mis ojos, yaciendo en sus tumbas, palpitan al saberse "retornados" a su hogar.
Soy Ingeniero, Soy Hombre, Soy Esposo, Soy Padre...pero sobre todo, quiero ser humano, quiero no juzgar, por que a los míos no los juzgaron, cuando en otras tierras dejaron su sudor, sus lagrimas e inclusive hasta la vida.
Soy un español al que le dijeron "Español!" como un insulto o una burla, y que cuando lo escuchaba alzaba la cabeza con orgullo...
Pero también hoy soy al que le podrian decir "Latino!" y de la misma forma la levantaria, pues pobre de aquel que no agradece a los que le dieron de comer.
Soy el amor a una patria que apenas conozco,pero que hace mucho, hice mía.
Hermanos Españoles, sangre de mi sangre, hagamos que el mundo se sienta orgulloso de nosotros, demos ejemplo, como nuestros padres lo hicieron, pero si aun así hay algunos que no quieran entender lo hermoso de la convivencia, entonces, hermanos del mundo, levantemos la cabeza y sigamos trabajando...por nosotros y por nuestra nueva o vieja tierra, oídos sordos y sigamos "haciendo caminos sin volver la vista atrás".
España...por mi y por muchos otros que como yo creen en ti, de corazón, mil gracias por acogernos!
Jairo.
jjnessi@gmail.com