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La energía solar se extiende y se convierte en la apuesta «verde» de la vivienda
LA INSTALACIÓN EN UN PISO RONDA LOS 2.000 EUROS Y EN UN UNIFAMILIAR, DE 3.000 A 5.000 EUROS
JOSÉ MARÍA OLMO
La energía solar térmica, que permite calentar el agua sanitaria de una vivienda con un ahorro energético que puede alcanzar el 100%, se ha extendido por el sector inmobiliario español y son ya muchas las administraciones que exigen la instalación de estos sistemas de producción de energía renovable en las viviendas de nueva construcción y en las rehabilitadas. La Junta de Andalucía será la próxima Comunidad en adoptar la directiva europea sobre ahorro energético en edificios, de obligatorio cumplimiento a partir del próximo 1 de enero.
El precio de uno de estos sistemas para una vivienda en altura es de 2.000 euros. Para un casa unifamiliar, el coste oscila entre los 3.000 y los 5.000 euros.
La Junta de Andalucía ha iniciado la tramitación de la Ley de Energías Renovables y Eficiencia Energética que obligará a instalar placas solares en las nuevas construcciones y en las edificaciones rehabilitadas. La Junta se adelanta de esta manera a la directiva europea sobre eficiencia energética de los edificios que entrará en vigor el próximo 1 de enero. Diferentes ayuntamientos, entre ellos el de Madrid, cuentan desde hace tiempo con ordenanzas municipales que obligan a los promotores a incluir en la finca sistemas de ahorro energético.
La instalación de placas fotovoltaicas permite cubrir todo el consumo eléctrico de la vivienda, pero requieren un gran número de metros cuadrados disponibles para instalar las placas y la inversión es demasiado elevada. Los más comunes son los sistemas de energía solar térmica, tanto en viviendas en altura como en plurifamiliares. En estos sistemas, las placas solares calientan el agua sanitaria de la vivienda, sin recurrir a la electricidad o el gas-oil, y la canalizan a un depósito-caldera, que la almacena a una temperatura elevada, de unos 60ºC. Desde el depósito, el agua se distribuye por toda la vivienda igual que en una instalación normal.
El ahorro energético que puede conseguirse con una instalación de placas solares térmicas puede alcanzar el 100% del consumo habitual. La cobertura depende de factores como el rendimiento de las placas, la cantidad de horas de sol, el número de ocupantes de la vivienda y el aislamiento térmico del hogar.
Las administraciones con leyes u ordenanzas de energías renovables y ahorro energético fijan la cobertura mínima que deben alcanzar estos sistemas en las nuevas construcciones. El mínimo exigido oscila entre el 60% y el 75% del gasto eléctrico. La ordenanza del Ayuntamiento de Madrid, que entró en vigor a finales del año 2003, exige que en edificios con una demanda total de agua sanitaria inferior a 1.000 litros, el aporte solar sea del 60% del consumo. Para las fincas con un consumo de litros mayor, el aporte solar debe superar el 75%.
Los constructores incorporan las instalaciones a los edificios y repercuten directamente su precio en el coste de la vivienda. En las viviendas rehabilitadas, también es obligatorio dotar a la finca de este tipo de energía renovable.
Opciones
Los modelos básicos calientan sólo agua sanitaria, es decir, la que se emplea, por ejemplo, para la ducha y lavar los platos, y también la que emplean los electrodomésticos. «Los de agua sanitaria son los más frecuentes, pero los hay más caros que calientan el agua de la calefacción», explica Jordi Monje, técnico de la empresa Soliclima. Se trata de sistemas más avanzados, que generan más energía y cubren también parte del consumo de la calefacción del hogar.
El precio de la instalación y el equipo para un edificio de 20 viviendas ronda los 40.000 euros (2.000 euros por casa). La vida útil de las placas -serían necesarias entre 40 y 50- es de unos 25 años. A partir de ese momento, su rendimiento comienza a caer en picado. Los depósitos tienen una vida más corta, de aproximadamente 10 años, aunque las gamas más altas también pueden alcanzar el cuarto de siglo. En una vivienda unifamiliar, ocupada por tres o cuatro personas y con una superficie de 100 metros cuadrados, el coste de un sistema capaz de generar el 70% de la energía necesaria se mueve entre los 3.000 y 5.000 euros, dependiendo de la configuración de la vivienda y de su ubicación. Un modelo de mayor potencia, que también cubra el consumo de la calefacción y con capacidad para ahorrar un 40% del gasto energético, asciende a los 12.000 euros.
Pero la inversión es rentable. «De cuatro a siete años se amortiza un sistema de agua sanitaria caliente, mientras que un sistema que cubra el consumo de la calefacción se amortiza de seis a nueve años», apunta Daniel Gómez, especialista de la firma Ecoinnova. «Y eso teniendo en cuenta los precios actuales de la energía, que subirán en los próximos años. Además, hay subvenciones de ámbito estatal y autonómico que abaratan los costes».
Las instalaciones de energía solar térmica se combinan con las energías convencionales. Si por cualquier motivo -excesivo consumo de agua, menos días de sol o temperaturas ambientales excesivamente bajas- el sistema es incapaz de proveer a la vivienda de suficiente agua caliente, la instalación utiliza automáticamente electricidad o gas-oil para completar la cantidad de energía necesaria. Algunas calderas tienen incluso quemadores intercambiables, que modifican fácilmente el tipo de energía consumida.
El Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía subvenciona en la actualidad el 30% del importe de la instalación. Además, el Instituto de Crédito Oficial ofrece créditos blandos a 10 años por el 80% del coste de la inversión. Las subvenciones se pagan, por lo general, a los propios instaladores, que repercuten el importe de la ayuda en el precio de venta de los equipos con un descuento. A las facilidades administrativas hay que sumar el ahorro en la factura que pagan los hogares, además de los beneficios medioambientales que suponen las energías renovables, al reducir las emisiones contaminantes a la atmósfera y el consumo de materias primas.
Mirar el siguiente enlace que es interesante
Funcionamiento de un sistema de agua caliente por energía solar térmica
http://www.elmundo.es/suplementos/suvivienda/2005/402//pdf/solar.pdf