Estoy de acuerdo con ninescoco. Yo asistí en mi adolescencia a un colegio privado, y por supuesto que el director iba a hacer negocio. Nos racaneaba cosas tan tontas como el papel higiénico de los baños o la calefación. Pero la calidad tanto humana como profesional de todos los profesores que tuve era excepcional. El nivel académico con el que saliamos todos era muy bueno igual que el índice de aprobados en selectividad y el recuerdo que yo tengo ahora de mi "cole" es estupendo.
Ahora yo he llevado hasta este año a mis hijos a un colegio privado, y la historia se repite, las instalaciones y los medios son muy pobres, pero los profesores excelentes, y pienso que mis hijos entrarán en el colegio Valle con un buen nivel.
Es lo de siempre, los colegios privados son un negocio como otro cualquiera y el dueño/director quiere rentabilizar a tope su inversión, pero eso no está reñido con tener un buen profesorado y un buen nivel académico.
Para terminar con mi rollo os diré que las propias profesoras del colegio de mis hijos cuando les conté mis dudas ante la posibilidad del cambio, me animaron mucho ya que todas opinan que un colegio nuevo es un proyecto muy bonito para todos, profesores, padres y alumnos. La piscina..., bueno, pues ya vendrá, no creo que sea lo más importante, y lo del idioma, pues yo creo que los padres podremos hacer algo cuando el colegio se ponga en marcha.
Un saludito