Muy buenos días, yo sólo voy a contar mi experiencia en el hospital de Torrejón, que ha dejado mucho que desear...
13 de diciembre de 2014 (día que fui ingresada para dar a luz), 15 de diciembre 2014, día del alta.
Primero que nada no soy vecina, vivo en Chamberí y me correspondía dar a luz en un excelente hospital donde me vi durante todo el embarazo. Por unas amigas alarmistas que me sembraron muchas dudas sobre los hospitales grandes donde atienden partos masivamente, me fui a media hora de mi casa pensando que valdría la pena dar a luz en un sitio que respeta el parto natural.
Antes de escribir todo lo negativo quiero aplaudir la atención de enfermería. Muy profesionales, muy amables y pendientes en todo momento.
Aquí comienza mi aventura... Todo fue tan natural que me sentí desatendida y descuidada. Empezando por que varias veces pedí la epidural y se hacían los locos. Al llegar al hospital, a las 7 de la mañana, les comunique que mi intención era usar anestesia y la matrona me respondió extrañada: vas a usar epidural?
Por otra parte, esto fue cuestión de mala suerte, pero considero importante decirlo. Me metieron en un paritorio donde había una reforma en la habitación contigua. Un taladro me tuve que aguantar durante todo el trabajo de parto (2 horas). Yo con los dolores insoportables y el taladro encima. Cuando rompí aguas me cambiaron de paritorio. Supongo que habrá sido cuestión de disponibilidad..
Cuando estaba dilatada en 4, mi marido tuvo que salir a llevar a nuestro niño de 3 años a casa de unos amigos ya que no tenemos familia aquí y no queríamos molestar a nadie por la madrugada. Las matronas sabían que él se había ido y me dejaron sola en el paritorio diciendo que cualquier cosa les llamara por el botón de emergencia. Al quedar sola, me vinieron unas contracciones insoportables con unas ganas de pujar incontenibles y se me ha salido la cabeza de la niña. Llevaba un rato largo llamando al botón rojo y NADIE venía. Milagrosamente llegaron las dos matronas y me ayudaron a terminar de sacar a la niña. Fueron muy amables, pero ya yo había parido prácticamente sola. Gracias a Dios todo iba bien y había sido monitorizada al llegar a hospital.
Para mí esto fue lo peor. A penas nacer la niña pregunté cándo la vería el pediatra y me dicen que hasta el día del alta, si no existe ningún problema, no la vería mas que el departamento de enfermería. Me la entregan envuelta y al llegar mi marido la revisa. Encuentra un hematoma muy grande y pronunciado en un codo, pensamos que se habría caído e informamos a los enfermeros. Por su puesto, solicitamos un pediatra. Los enfermeros, muy profesionales y amables piensan que puede ser un hemoangioma y dicen que dos días después la vería el pediatra. Osea, no hubo forma de que este profesional llegara antes. El día tan deseado, llega el pediatra y no se lee el informe donde los enfermeros apuntaron el defecto en el codo. El profesional, esta a punto de firmar el alta cuando mi marido le dice de revisarle el codo ya que ni se había dado cuenta de la revisión tan escueta que hizo a nuestra bebe. Nos hemos dirigido a La Paz, donde priorizaron nuestra cita y nos atendieron excelente (en el área de dermatología). Afortunadamente, no fue necesario hacer biopsia que en un principio, el especialista pensó que podía haber algo mas debido al tamaño de la lesión....
Por otra parte, en el Hospital de Torrejón, nos firmaron el alta sin el examen de audición ya que todos los aparatos estaban rotos y tuvimos que volver a los 2 días para hacerlo.
En la revisión del mes, en nuestro centro de salud, se nos informa que la niña tiene una pierna mas larga que la otra y se nos pide el informe del alta para ver el resultado del eco de caderas (que ha debido ser realizado en el hospital donde di a luz, antes de dar el alta) Le digo al pediatra que nunca se nos dijo nada de este defecto y mucho menos nos dieron orden de hacer un eco de caderas con el fin de descartar displasia de cadera. Tuvimos que correr para hacer estas pruebas en el Clínico, donde nos priorizaron y a la semana, nos estaban haciendo el eco ya que tenía que estar diagnosticado antes de los 3 meses para comenzar el tratamiento lo antes posible.
CONCLUSIÓN: Opino que falta atención médica profesional.