Precisamente ese será uno de los asuntos que trataremos el domingo, la conveniencia de dejarle claro a Neima que, aunque firmemos lo que nos impone, lo hacemos en contra de nuestro parecer (y aunque decíamos antes que podemos hablar con transparencia en este foro, yo creo que es mejor que profundicemos sobre ésto en la reunión sin aventurar más detalles por ahora).
Neima dice siempre aquello de "si no estás de acuerdo, no firmes y te devolvemos el dinero", o lo de "si no estabas de acuerdo, ¿por qué firmaste el contrato?". Que no nos engañen con esos razonamientos simplistas: la ley nos protege (al menos en teoría), pues constituye un abuso por parte de Neima la imposición de clausulas abusivas. Si lo firmamos es porque no queremos renunciar al bien (la casa), pero es evidente que no se trata de una negociación en igualdad de condiciones, por lo que ese tipo de argumentos no son válidos.
Un saludo y hasta el domingo,
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