Efectivamente, no vivimos en Burgos, vivimos en SICILIA.
Acabo de presenciar el acto de corrupción pública más bochornoso de mi vida. Será que yo no trabajo en la Cooperativa San Bruno Obispo.
LAS CUENTAS HAN SIDO APROBADAS EN CONTRA DE LA VOLUNTAD DE LOS SOCIOS.
César, que hacía de maestro de ceremonias, ha aprobado las cuentas él solo.
César ha preguntado: “ -Votos en contra...”
Se han levantado unas 35 manos.
Luego:” -Votos a favor...”
Se han levantado unas 10 manos como mucho...todos lo hemos visto.
(A simple vista, la sensación de superioridad del número de manos en contra, frente a las manos a favor, era abrumadora.)
” –Abstenciones...”
No sé cuántas manos se levantaron...
...y ante la atónita mirada de todos los allí presentes, César dice:
“ -Quedan aprobadas las cuentas por 29 votos a favor y 26 en contra.”
Inmediatamente protesta todo el Salón de Actos ante semejante tergiversación de los hechos, pidiendo que se contara con justicia y que se repitiera la votación y César con toda la cara dura del mundo dice:
“ –Quien no este de acuerdo con la votación que impugne la Asamblea. La convocaremos otra vez y las cuentas serán aprobadas.”
No ha habido Ruegos y Preguntas.
No ha habido nombramiento de Interventores del Acta.
Corrupción en estado puro en la misma cara de los socios.
O sea , que ya sabéis, a impugnar la Asamblea General.