Debería, ya que su entrada en vigor fue al día siguiente de su publicación (el 7 de diciembre).
Básicamente se modifican los aranceles notariales (que pasan a ser documento sin cuantía en lugar de fijarse en el valor del préstamo) y las comisiones por cancelación anticipada (del 0,5% para amortizaciones durante los 5 primeros años de vida del préstamo y del 0,25% para amortizaciones posteriores).