Yo llevo yendo desde que lo abrieron, normalmente a tomarme unas cañitas por las tardes en verano, o los fines de semana a la hora del vermu, y la verdad, que no lo cambio por ningun otro sitio.
Las tapas son de diseño, pero estan tremendas, y la cantidad no es poca en absoluto.
El menu diario de dentro tampoco esta mal de precio.
Lo que si que es caro, es comer de carta dentro de la zona de restaurante, es la unica pega que le pondria.