La partida económica, por valor de 200.000 euros, estaba contemplada en la modificación presupuestaria que se realizó este verano de dos millones para diversas mejoras en la localidad, como recordó el regidor, que subrayó que Seseña es uno de los municipios con una de las medias de edad más bajas del conjunto nacional, por lo que los vecinos demandan este tipo de dotaciones.
El alcalde comentó que el proyecto implica, por un lado, reforzar las medidas de seguridad de los principales parques con que cuenta el término municipal, sobre todo con la instalación de suelo de caucho y, por otro, llevar mobiliario infantil a diversas zonas verdes que aunque como tales, no cuentan con elementos recreativos para los menores.
De esta forma, «se mejoran los actuales y se amplía el ‘parque’ de parques infantiles repartidos por el pueblo», incidió el regidor ‘popular’, que agregó que el pliego que rige el concurso da la posibilidad a las empresas que se presenten de proponer alternativas que mejoren el proyecto inicial planteado por el Ayuntamiento.
«Se da la posibilidad a los licitadores a que, una vez que han estudiado la situación de los parques, que gracias a las últimas mejoras se encuentran en buen estado, a presentar alternativas», porque no todos los espacios cumplen con lo necesario en cuanto a seguridad, porque «aunque hay areneros, no hay suelo de caucho».
A la espera de las mejoras. A este respecto, el alcalde no sabe si se podrá llegar con ese suelo a todos los parques actuales y que se van a crear con este tipo de suelo, aunque sí a los parques principales, de forma que «habrá que ver las mejoras que puedan presentar las empresas».
Los criterios que se tendrán en cuenta a la hora de determinar la empresa que finalmente se hace con el proyecto, que tiene un plazo de duración de tres meses sin posibilidad de prórroga, están fundamentados en la mejora de la propuesta económica en un 50 por ciento y en cuestiones como el valor estético, la versatilidad del juego y su valor lúdico, aspectos técnicos relacionados con la calidad de los materiales, pero también las mejoras que pueda ofertar el licitador y que suponen hasta 15 puntos.