Articulo en el confidencial:
The Economist’ identifica al Pocero, los pelotazos y la corrupción municipal como símbolos de la España de hoy
@Fátima Martín
Martes, 19 de septiembre de 2006
Paco Hernando, ‘el Pocero’, se ha hecho famoso, no ya en nuestro país, sino en todo el planeta. “Mi ciudad”, como le gusta llamar a su controvertida promoción de Seseña, protagoniza una información de la prestigiosa revista británica The Economist, que identifican el furor constructor toledano y su presunta corrupción municipal como símbolos de la España de hoy.
“Seseña es el símbolo de la España de hoy. Representa una economía-boom, un mercado inmobiliario peligrosamente recalentado y -según el nuevo alcalde- una preocupante dosis de avaricia municipal y corrupción. En el secarral de la provincia de Toledo se han construido más de 13.000 apartamentos. Se trata del mayor desarrollo de viviendas en un país obsesionado con el ladrillo. Jóvenes demandantes de primera vivienda harán las mudanzas a finales de año. Han sido forzados a desplazarse 40 kilómetros fuera de la capital por unos precios que se han más que doblado desde 1997. Seseña, un pueblo de menos de 10.000 personas, se prepara para recibir a 40.000 más".
“El boom de la vivienda genera mucha abundancia. Paga los salarios de los trabajadores y, mientras la burbuja española no pinche, seguirá enriqueciendo a sus promotores. También ayuda a llenar las arcas municipales con billetes a través de licencias y otros impuestos. Algunos concejales se benefician directamente, como demuestra el hecho de que dos están en la nómina de ‘el Pocero’, así como la hija de un tercero. Se ha reclamado a las autoridades que investiguen. El promotor niega toda corrupción de los concejales, que rechazan, asimismo, cualquier irregularidad. No hay cargos criminales contra ninguno".
“El nombre de Seseña ya se ha sumado a la creciente lista de ciudades españolas azotadas por escándalos relacionados con el ladrillo. Los españoles llevan tiempo sospechando de los pelotazos inmobiliarios. Pero la evidencia llegó con el arresto de la corporación municipal de Marbella, hoy en manos de una gestora. Casas de vacaciones irregulares pueden ser derribadas. La democracia local está, de hecho, muerta".
"¿Quién pagará las facturas cuando la burbuja estalle?"
“Casi cada semana surge un nuevo escándalo relacionado con la construcción. Los concejales marbellíes han sido acusados de recibir sobornos, pero la corrupción en otros sitios a menudo es más sutil. Mientras España construye, sus ayuntamientos dependen cada vez más de los ingresos por licencias, ventas de terrenos e impuestos sobre los bienes inmuebles. Un alcalde que vende suelo municipal o que promueve un desarrollo urbanístico, retorciendo la ley si es necesario, obtiene más para gastar en proyectos que se traducirán en votos". “Debido a la opacidad de las cuentas municipales, es difícil saber con exactitud cuánto dependen los ayuntamientos españoles de la construcción. El Gobierno y las autoridades suelen hacer oídos sordos, ya que nadie quiere matar a la gallina de los huevos de oro de la construcción". “Lo peor es que se ha convertido en algo normal”, alega Alejandra Gómez-Céspedes, una criminóloga de la universidad de Málaga. “Cuando aplicas la ley, parece como si actuaras contra las libertades civiles”, añade.
“Cada año aumenta el número de pisos construidos. El año pasado se iniciaron más de 700.000 unidades, frente a las 225.000 del Reino Unido, cuya población es un tercio mayor que la española. El caso de Marbella muestra que la ley al final se aplica en algunos lugares. El jefe de la Guardia Civil planea dedicar unidades especiales para perseguir los delitos urbanísticos. Con todo, existe un peligro añadido para los ayuntamientos. El mercado inmobiliario español puede estallar. ¿Quién pagará entonces las facturas?”.